Tenía frío, aunque hubiera un gran sol afuera. Era común eso en mí, claramente algo pasaba conmigo. Mis manos estaban frías, mis guantes en este caso solo eran un adorno más ya que no me abrigaban nada. Probablemente no era alguna enfermedad ni nada por el estilo, era un simple problema emocional. Me resultaba algo gracioso lo bipolar que podía ser en un día, me sentía tan mal a veces con ganas de derramar algunas lágrimas pero sin embargo sonreía, aunque no era verdadera. Ella llegó y se sentó al lado mío. Me miró directo a los ojos, sabiendo que algo me pasaba.
- Cambia esa cara, sabes que estoy aquí y no me marcharé.- me dijo regalándome una linda sonrisa.
La miré a los ojos, esbozando una sonrisa.- No tienes nada de que preocuparte, estoy aquí para lo que necesites.- repitió una vez más haciendo que esa sonrisa forzada que tenía en un principio se hiciera realidad. Me gustaba tanto eso de ella, esa forma tan mágica de hacer que alguien se sienta mejor. Era mágica...
viernes, 24 de abril de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Tengo que hacerte preguntas al respecto de ese tema :)
ResponderEliminarTe quiero ^^